Inventamos historias que solo ocurren en nuestra cabeza o nos gustaría que ocurrieran. Somos actores y otras espectadores, pero cuidado con las películas que hacemos, porque en ocasiones son ciencia ficción.
Es cierto, que lo que parecían romances puede transformarse en drama, las comedias en terror o una aparente obra
maestra, en un horror.
No tenemos que disfrutar todo lo que vemos y protagonizamos, pero sí intentar ser críticos.
Tenemos que descubrir qué papel nos toca en cada una de ellas.
Puede ocurrir que las personas culpen y juzguen a otros, por películas en las que ellos son protagonistas y los demás ni tan siquiera figurantes.
No se trata de culpas, se trata de disfrutar o prestar atención a la proyección y salirte de la sala siempre que puedas o no te guste la función.
Recuerda que siempre seremos el malo o el bueno en la película de alguien.
Sí, somos muy dados jajaja
ResponderEliminarA veces es la única razón por la que los problemas crecen
Bueno, si luego nos damos cuenta, es lo positive :)
ResponderEliminarHola: una gran verdad... seguimos en contacto
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