lunes, 10 de marzo de 2014

EMOCIONES

Después de mucho tiempo sin escribir en el blog, me siento delante del ordenador con unos minutos...

Es cierto que a veces cuando vamos a escribir de algo debemos investigar, fundamentar, contrastar las necesidades de los usuarios... pero otras, sólo necesitamos expresar, dejarnos llevar por nuestras emociones.

Como muchos de vosotros sabéis intento relacionar lo que puedo con el mundo de la infancia, porque es la rama en la que me especialicé, y porque es la base de nuestra vida. Nos da más respuestas de lo que pensamos sobre el adulto que somos.

Como siempre os digo, no quiero escribir artículos extensos que no lleven a nada, sino pequeños textos que a cada uno nos hagan reflexionar de algún modo. Casi siempre escojo una palabra clave, que en muchas ocasiones relaciono con otras...

¿Por qué emociones? Porque la vida gira en torno a ellas y porque nos cuesta expresarlas, se nos quedan dentro, nos duelen, nos conmueven, nos hacen mover montañas o paralizan... y en muchas ocasiones no somos ni siquiera conscientes de qué sentimos...

Cuando trabajo emociones con los más pequeños siempre expreso distintos estados anímicos y opciones de porqué una persona puede sentirse así. ¿Estás enfadado? ¿triste? ¿contento? Puedes estar enfadado porque te has caido, se ha estropeado tu dibujo, se ha ido mamá...

Ellos elegirán. Aunque a veces no expresen o sólo asientan con la cabeza, estamos facilitando poner nombre a sus emociones, algo que les ayudará en un futuro a manejarlas y a no ser manejados por ellas.

Ojalá supieramos lo importante que es que las experimentemos desde pequeños sin privarnos del dolor de una caída, del llanto por frustración si alguien nos arrebató un juguete, de la alegría de ver a nuestros seres queridos, la felicidad de un abrazo de mamá o un beso de los abuelos, la sorpresa de encontrar esa piedra fantástica o el enfado que nos produce el sueño...

Lo más importante es experimentarlas y saber qué se siente con cada una de ellas, que nos ayuden a ponerles nombres hasta que seamos capaces de hacerlo nosotros mismos.

Perdamos el miedo a sentir, dejemos que nuestros pequeños descubran todas sus emociones y serán mayores que conocen y manejan sus sentimientos sin miedo a expresarse, a temer el dolor de una pérdida, a no mostrar la alegría por timidez o vergüenza, a necesitar de otro para sentirse pleno...

APRENDAMOS JUNTOS A EMOCIONARNOS, Y RECONOZCAMOS ENTRE TODOS QUE NADIE NOS ENSEÑÓ A HACERLO.

Debemos conocerlas todas, experimentarlas, no rechazarlas ni evitarlas, somos lo que somos gracias a ellas :) EMOCIÓNATE Y EXPRESA ;)