martes, 9 de octubre de 2012

RABIETAS

Las rabietas.

El periodo de autoafirmación o “rabietas” puede aparecer a partir del año y medio hasta los tres años y medio o incluso más si no lo resolvemos (dependerá de múltiples agentes en la forma, duración, virulencia,...) En la mayoría de los casos, se originan como respuesta a un sentimiento que no pueden controlar.

Escucho habitualmente a familias angustiadas por ver que sus hijos/as cambian drásticamente de ser niños/as pacíficos o como ellos denominan "buenos" a seres indomables.

Debemos mantener la calma, es una etapa por la que la gran mayoría de niños/as tienen que pasar. Es el inicio de su posicionamiento como persona. Se está conociendo,  se está presentando y formando. 

Estos conflictos y la manera en la que respondamos ante ellos serán muy importantes, serán la base de la relación que vamos a tener con nuestros hijos/as. El grito genera grito, la calma genera calma, etc...
¿Pero cómo voy a estar calmada/do  cuando mi hijo/a se tira al suelo y se pone a gritar?

Es una situación desagradable, pero lo primero que debemos hacer para superarla es aceptarla. TODOS PASAN POR ELLA (antes o después, más o menos fuerte, pero llega) Tenemos que entender que los niños/as no tienen recursos, herramientas ni medios para responder ante su angustia, su pena, su aburrimiento y otros tantos sentimientos. Que en estas edades, los reciben como oleadas que les superan y desembocan en llanto, en grito, en un NO.

Nosotros como adultos, también sentimos pena, enfados y sentimientos de frustración, por qué ellos van a ser menos. Para un adulto es difícil afrontar estos conflictos (internos y externos) imaginaros para niños/as que empiezan a comprender todo lo que les rodes. 

Una manera efectiva de afrontar estas situaciones es escucharles, observarles, no creer que sabemos qué les pasa, indagar en las causas reales (cada situación tiene un desencadenante: sueño, hambre, querer un objeto, demanda de afecto...) 


Muchas veces no están en situación de contar nada ni nosotros de poder observar todo lo que les pasa. 

Hay que tener paciencia. Si comprendemos que es una etapa, no perderemos los papeles pensando que vuestros hijos e hijas quieren desafiaros constantemente (es su manera de expresar un sentimiento que les supera, muy parecido a esa ansiedad y frustración cuando no llega a algo, no lo consigue, escuchó algo que no le gusta, no tiene tiempo...)

Expresarles que entendemos por lo que están pasando, que vamos a buscar una solución (ponernos en su lugar y no pensar que todo lo que les pasa son "tonterías"). Hay que mostrarles que el diálogo nos llevará a estar contentos a todos (en estas edades el diálogo debe acompañarse de acciones). No tenemos que terminar cediendo a lo que ellos quieren, sino mostrarles que a veces es posible y otras no. Sobre todo que siempre hay unas razones que podrán entender poco a poco. 

Para hablar siempre tendremos que estar CALMADOS, tanto nosotros como ellos. Cuando tengan comportamientos agresivos o griten, no les respondáis con más gritos, ya que entraréis en un círculo del que os costará salir. Sé que parece muy fácil de decir, pero contestadles serenamente hasta que podáis hablar de lo ocurrido (no dejando que pase mucho tiempo, ni repitiendo la conversación muchas veces, sólo cada vez que vuelva a ocurrir el conflicto). Los conflictos van clavándonos espinitas, pero con el diálogo las podemos ir quitando. 

No os sintáis mal porque a veces perdáis la calma, porque sois personas y vuestros sentimientos y situaciones también afectan y os desbordan (lo bueno es darse cuenta y confiar en el diálogo, que aunque es algo lento, da buenos resultados).

Sé que a muchos os parece absurdo este recurso, que estáis convencidos de que no sirve de mucho hablar a un niño/a, que los resultados no son visibles en un espacio corto de tiempo. Pero para que una planta crezca, se necesita cuidados y paciencia. A veces con todos los ingredientes no tendremos lo que queríamos, porque intervienen muchos agentes que nosotros no podemos controlar. 

En el caso de que os sintáis perdidos, podemos acudir a especialistas en "plantas" para exponerles nuestra situación :) y entre todos buscar soluciones :)

Si creemos en que las rabietas son una etapa que se puede superar satisfactoriamente, lo conseguiremos.

 Ánimo familias. 

Os dejo algunos artículos relacionados con el tema, si queréis ver otras visiones y seguir indagando:

CONFLICTOS DE 0 a 3

 LA DESOBEDIENCIA 

A QUÉ EDAD CONVIENE APLICAR UN CASTIGO 

RECOMPENSAS INMATERIALES 

CÓMO MANEJAR LAS RABIETAS

4 comentarios:

  1. Gracias guapa! Ayuda mucho leer textos como este, porque es exactamente lo que nos pasa y nos viene bien para saber manejarlo.
    Regaremos nuestra plantita así a ver que tal...
    Un abrazo!

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  2. Muchas gracias Candy... claro q es una etapa..! claro q asi debemos tomarla..! claro q los niños n o nos toman la madeida ni nos aplican chantaje emocional...! claro q hay que tener paciencia..!

    Buena info... a compartirla..!
    besos y q bueno es tenerte de vuelta..!

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    Respuestas
    1. ;) de nada TAnia, aún me quedan dos semanas para volver del todo, pero poco a poco :)

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